Te gustan las croquetas? A mi si, y con estos trucos los haces rápido sin ensuciar mucho. Esta receta hace la base con caldo y no con leche, quedan muy suaves. Cuando quieres cambiar los "tropezones" sólo tienes que usar un caldo apropiado para el relleno elegido. Por ejemplo, caldo de carne con taquitos de jamón serrano; caldo de verduras con espinacas salteadas; caldo de pescado con trozos de bacalao, las posibilidades son infinitas....
Ingredientes para aprox. 16 croquetas (depende del tamaño)
1 cebolla pequeña
50 gr. mantequilla
60 gr. harina (y para rebozar)
300 ml. caldo de ave (caliente)
nuez moscada - sal - pimienta
200 gr. gambas cocidas
2 huevos
pan rallado
aceite para freir
- Picar la cebolla muy pequeña y sofreír a fuego bajo en la mantequilla.
- Añadir la harina y seguir removiendo hasta que la mezcla (roux) se empieza a pegar al fondo del caldero.
- Añadir la mitad del caldo y remover con una varilla hasta que la salsa empiece a espesar. Añadir la otra mitad del caldo y seguir removiendo, llevar a ebullición y quitar del fuego.
- Añadir una pizca de nuez moscada y salpimentar a gusto. Añadir las gambas y remover.
- Verter la masa en una fuente, dejar enfriar y luego dejar enfriar en la nevera mínimo una hora.
- Colocar harina en una fuente de horno. Meter la masa bien fría en una manga pastelera y hacer churros sobre la harina. Mover la fuente para rebozar los churros.
- Preparar un plato con los huevos batidos y otro con el pan rallado.
- Cortar los churros en tamaño croqueta. Enharinar los extremos. Pasar por huevo y después por el pan rallado.
- Calentar el aceite a 180 ºC. (un trozo de pan se dora en pocos segundos). No debe humear.
- Freír las croquetas hasta doradas. Dejar escurrir sobre papel de cocina.
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